«Sanador Sotel. Por orden del Rey Demonio, he venido a tomar tu vida.»

Varias décadas desde que se convirtió en aventurero. Sin darse cuenta, Sotel había llegado al punto donde ya no podía elegir otro camino. A pesar de ser ridiculizado constantemente por sus compañeros, cumplía con su rol de sanador fielmente.

Pero esa vida de mierda llegó a su fin gracias a un ser que se hacía llamar «Raza Demoníaca»… o eso parecía.

En el momento en que Sotel aceptó su muerte, ¡¿de repente se encontró poseyendo el cuerpo de un joven desconocido!?